Análisis y Comparación de la Teoría Dasbien y los Tres Sentidos del Amor: Un Diálogo con la Psicología, la Filosofía, la Ética y la Espiritualidad para el Bienestar Sostenible y el Bien Común
Análisis y Comparación de la Teoría Dasbien y los Tres Sentidos del Amor: Un Diálogo con la Psicología, la Filosofía, la Ética y la Espiritualidad para el Bienestar Sostenible y el Bien Común
1. Introducción
La búsqueda de un bienestar integral y la promoción del bien común son temas centrales en la sociedad contemporánea, marcada por la desigualdad, la erosión de los valores y la complejidad de las relaciones humanas [1]. En este contexto, la Teoría Dasbien emerge como una propuesta singular para abordar la comprensión del amor y su papel en el desarrollo personal y colectivo [2]. Desarrollada por el peruano Andy Figueroa y sustentada en su libro Lo Bueno y un curso de una década de antigüedad [2], la teoría ha trascendido el ámbito de la autoayuda para ser presentada y discutida en foros académicos y publicaciones con revisión por pares [1, 3, 4]. Esta legitimación formal establece un punto de partida interesante para un análisis más profundo, ya que sitúa la propuesta en una fértil intersección entre la sabiduría práctica y la reflexión académica.
El presente informe tiene como objetivo principal examinar en profundidad la Teoría Dasbien, detallando sus fundamentos y sus tres «sentidos del amor» [5]. A través de un análisis comparativo, se establecerá un diálogo riguroso entre la teoría y diversos marcos académicos, filosóficos, éticos y espirituales que también buscan el bienestar y la prosperidad colectiva. La tesis central de este análisis sostiene que la Teoría Dasbien ofrece un modelo operativo para el bienestar sostenible, articulado a través de la interconexión de sus tres sentidos del amor. Si bien su enfoque práctico y accionable le confiere un valor distintivo, el modelo es susceptible a críticas, particularmente en lo que respecta a su posible sesgo individualista y su aparente negligencia de los factores socioeconómicos y estructurales que limitan el bienestar. Finalmente, el informe discutirá las implicaciones de esta teoría para el bien común, con el propósito de generar una comprensión más matizada de sus fortalezas y limitaciones.
2. Fundamentos de la Teoría Dasbien: El Amor como Acción Deliberada
La Teoría Dasbien se distingue por una redefinición fundamental del concepto de amor [2]. Contrario a las percepciones comunes que lo asocian con sentimientos, emociones, deseos o pensamientos, la teoría lo conceptualiza y define de manera concisa como una acción intencionada: «amar es dar algo bueno…» [2, 3]. Esta premisa traslada el amor de un estado pasivo o afectivo a un acto deliberado y verificable. La teoría enfatiza que el amor, como el desarrollo del individuo, es algo que se puede y se debe aprender [2]. Actuar por ignorancia o por un conocimiento equivocado de lo que significa amar, según la teoría, puede conducir al sufrimiento y la destrucción [2]. Por lo tanto, el Dasbien propone una guía para un «amor saludable» que es posible aprender y perfeccionar [2].
El acto de amar, en este modelo, se describe a través de un proceso cíclico y funcional denominado «el Triángulo del Amar» [2]. Este proceso se compone de tres momentos interconectados que guían la acción de quien ama (el emisor):
- Subjetivar: El emisor investiga y se esfuerza por conocer el «mundo interior del receptor» [2]. El objetivo es comprender qué es lo verdaderamente «bueno» para el destinatario, asegurando que la acción de amor sea pertinente y beneficiosa [2].
- Intencionar: Con el conocimiento adquirido, el emisor «da algo bueno (según el receptor)» de manera intencionada [2]. La acción es consciente y dirigida a satisfacer una necesidad genuina del otro, no una proyección del propio deseo.
- Retroalimentar: El emisor verifica o comprueba que el receptor recibió el bien [2]. Este paso es crucial, ya que valida la efectividad de la acción y cierra el ciclo, permitiendo que el emisor aprenda y ajuste su comportamiento futuro.
El valor de la acción amorosa no radica simplemente en el acto de dar, sino en la validación de que el bien ha sido recibido. Esta perspectiva eleva la acción de amar más allá del mero altruismo, posicionándola como un proceso de madurez y evolución personal [3]. Al requerir que el emisor supere su propio egocentrismo para «ingresar al mundo de otro ser» [3], la teoría ofrece un manual para el desarrollo de un altruismo que no es solo generoso, sino también efectivo y desinteresado. El foco del bien se desplaza del emisor al receptor, garantizando que el acto de amor sea genuinamente beneficioso para el otro.
La Teoría Dasbien también categoriza el amor en «grados» y «niveles» [2]. El grado se refiere a la frecuencia o cantidad de veces que se recibe una acción de amor (por ejemplo, los padres que alimentan a sus hijos 365 veces al año) [2]. El nivel mide la complejidad de la acción, yendo de lo concreto y efímero (dar comida) a lo abstracto y duradero (conversar sobre el valor personal) [2]. Esta distinción permite entender la riqueza de las interacciones humanas, reconociendo que acciones menos frecuentes pero de un nivel superior —como la donación de un riñón o la manifestación de aprecio y apoyo incondicional— pueden tener un impacto más profundo en la vida de una persona [2].
Tabla 1: Los Tres Sentidos del Amor de la Teoría Dasbien
Sentido del Amor | Descripción del Sentido | Definición Operativa según Dasbien | Ejemplos Concretos |
Recibir amor de otros seres | Reconocer la importancia de la interdependencia y la apertura para recibir afecto y apoyo de la comunidad. | Disposición consciente a aceptar lo que otros tienen para dar de manera genuina, no pasiva ni dependiente [5]. | El apoyo emocional de amigos o familiares en un momento de crisis [6]. |
Dar amor a nuestro propio ser | Cultivar la autocompasión, el autocuidado y el crecimiento personal como base para una vida plena. | Acciones intencionadas para beneficiar el propio bienestar físico, emocional y psicológico [5, 7]. | Escribir un diario [8], establecer límites personales [7], o practicar mindfulness [9]. |
Dar amor a otros seres | Actuar de forma deliberada y desinteresada para beneficiar a otros, contribuyendo al bienestar colectivo. | Realizar una acción altruista, investigando primero qué es lo «bueno» para el receptor y verificando el resultado [2, 5]. | Donar un órgano [2], servir en un proyecto comunitario [10], o apoyar a un compañero sin esperar reciprocidad. |
3. La Taxonomía del Bienestar en la Teoría Dasbien: Los Tres Sentidos del Amor
La Teoría Dasbien articula el bienestar humano a través de tres ejes interdependientes que funcionan como un sistema holístico [5]. Estos «sentidos del amor» proporcionan una hoja de ruta práctica para una vida equilibrada y con propósito.
3.1. El Sentido Receptivo: Recibir amor de otros seres
Este sentido subraya la necesidad fundamental de los seres humanos de conectar y recibir apoyo de los demás [5]. Lejos de ser un acto de pasividad o dependencia, la teoría lo concibe como una «disposición consciente a aceptar lo bueno que otros tienen para dar» [5]. La investigación en psicología ha validado consistentemente los beneficios de esta apertura. Se ha demostrado que las relaciones cercanas y las conexiones sociales son una forma natural de gestionar el estrés crónico, reducir la soledad y la ansiedad, y mejorar la salud mental en general [6]. El apoyo social no solo atenúa el dolor y la tristeza, sino que también mejora el funcionamiento cognitivo y refuerza los hábitos saludables, añadiendo un sentido de significado a la vida [6, 11]. En este sentido, la Teoría Dasbien propone un marco para la práctica consciente de lo que la ciencia psicológica ha identificado como un pilar del bienestar subjetivo: las «relaciones positivas» [12].
3.2. El Sentido Intrapersonal: Dar amor a nuestro propio ser
Este segundo pilar se enfoca en el interior del individuo, promoviendo el autocuidado y la autocompasión [5]. La teoría considera este sentido como un pilar esencial, ya que argumenta que sin un amor propio equilibrado es difícil sostener relaciones saludables o compromisos auténticos con los demás [5]. Este concepto encuentra un paralelismo directo con el trabajo pionero de la psicóloga Kristin Neff, quien ha definido la autocompasión como la capacidad de tratarse a uno mismo con amabilidad y comprensión en momentos de dificultad [13, 14]. El modelo de Neff se basa en tres componentes: la bondad hacia uno mismo, la humanidad compartida (reconocer que el sufrimiento es una experiencia humana universal) y la atención plena (mindfulness) [9, 14].
El sentido de «dar amor a nuestro propio ser» en la Teoría Dasbien se alinea con estas prácticas [5, 15]. Ejercicios como la escritura reflexiva, el contacto físico auto-tranquilizador y la reformulación del autocrítico [15] son formas de aplicar este principio. La noción de autocuidado, que se relaciona intrínsecamente con este sentido, es definida por UNICEF como un enfoque de salud en el que la persona asume la responsabilidad de su propio bienestar integral [7]. Este autocuidado no es un acto egoísta, sino un requisito para poder cuidar de los demás de manera sostenible [7].
3.3. El Sentido Altruista: Dar amor a otros seres
Este sentido representa el componente más visible y orientado hacia la comunidad de la Teoría Dasbien [5]. Implica la acción deliberada de beneficiar a otros sin expectativas de reciprocidad [5]. Este principio resuena con los postulados de la psicología humanista, en la que figuras como Carl Rogers y Abraham Maslow argumentan que la autorrealización no es un estado puramente individual, sino que se completa con la contribución al bienestar colectivo [5]. El altruismo se define como la «preocupación por el bienestar de los demás», incluso a costa del interés propio [16]. La Teoría Dasbien, al definir el amor como una acción intencionada que requiere investigación y verificación [2], ofrece una guía operativa para el comportamiento prosocial [17], proporcionando una «receta» aplicable para la entrega generosa [5].
4. Análisis Comparativo: Un Mosaico de Propuestas para el Bien Común
La singularidad de la Teoría Dasbien radica en su capacidad para dialogar con y superponerse a diversas disciplinas académicas, éticas y espirituales.
Tabla 2: Comparación Multidisciplinar de la Teoría Dasbien
Marco Teórico | Enfoque Principal | Locus de la Acción | Principio del Bien Común | Relación con Dasbien |
Teoría Dasbien | El amor como acción deliberada a través de tres sentidos interdependientes: recibir, dar a uno mismo y dar a otros [2, 5]. | Principalmente individual, con un impacto social [2]. | La suma de «dar algo bueno» a nivel individual [2, 3]. | Modelo operacional, prescriptivo y holístico que integra los otros enfoques de manera práctica [5]. |
Psicología Positiva (PERMA) | Modelo descriptivo del bienestar a través de cinco elementos: emociones positivas, compromiso, relaciones, sentido y logros [18, 19]. | Principalmente individual [20]. | Logro y sentido, a menudo definidos en términos de contribución [19, 21]. | Converge en las relaciones y el sentido de propósito. Dasbien es una «receta» para alcanzar algunos de los elementos de PERMA [5]. |
Autocompasión (Neff) | Cultivar la amabilidad, la humanidad compartida y la atención plena ante el sufrimiento personal [9, 14]. | Individual [13]. | Ayuda al individuo a estar mejor para los demás, reconociendo la humanidad compartida [7]. | Dasbien incorpora la autocompasión como un pilar esencial («dar amor a nuestro propio ser»), alineándose con el trabajo de Neff [5]. |
Utilitarismo | Ética consecuencialista que busca maximizar el placer y el bienestar para el mayor número de personas [22, 23]. | Colectivo [22]. | «El mayor beneficio para el mayor número de personas» [23]. | Dasbien es consecuencialista a nivel micro (el «bien» se define para el receptor individual), evitando los dilemas éticos del utilitarismo [2]. |
Deontología | Ética del deber, donde la moralidad de una acción se basa en el cumplimiento de normas y principios [24]. | Individual (basado en el deber personal) [24]. | La adhesión a principios morales universales [24]. | Contraste total. El valor de una acción en Dasbien depende de su resultado beneficioso para el receptor, no de la adherencia a una norma abstracta [2]. |
Estoicismo | Dominio de las emociones y el pensamiento a través de la razón, centrándose en lo que se puede controlar para alcanzar la felicidad [25, 26]. | Individual [25, 26]. | La virtud es el único bien [26]. | El sentido de «dar amor a nuestro propio ser» se alinea con la autogestión y el enfoque en lo interno del estoicismo [25]. |
Comunitarismo | Crítica al individualismo liberal; la identidad del «yo» está constituida por los lazos comunitarios y morales [27, 28]. | Colectivo y comunitario [28, 29]. | El bien es un producto de la vida colectiva [30]. | La interdependencia de los tres sentidos del amor de Dasbien se sitúa en un diálogo con esta filosofía, aunque su enfoque aún se presenta como una elección individual [5, 28]. |
Budismo (Interser) | La realidad de la interconexión fundamental entre todas las cosas; «no existimos de forma independiente» [31]. | Individual (práctica) y colectivo (realidad) [31]. | La cesación del sufrimiento para todos los seres [32]. | Proporciona la base ontológica del modelo Dasbien. «Recibir» y «dar» son manifestaciones de la realidad del «interser» (inter-being) [31, 33]. |
4.1. Diálogo con la Psicología Académica
La Teoría Dasbien comparte puntos de contacto significativos con modelos de bienestar contemporáneos. Por ejemplo, el Modelo PERMA de Martin Seligman, considerado uno de los pilares de la psicología positiva, describe el bienestar a través de cinco elementos: emociones positivas, compromiso, relaciones, sentido y logros [18, 19]. La Teoría Dasbien se superpone claramente con los componentes de Relationships y Meaning [5]. Mientras que PERMA describe lo que contribuye al bienestar, Dasbien es una guía prescriptiva que ofrece un método para lograrlo [5]. El «dar algo bueno» a otros de Dasbien se correlaciona directamente con la búsqueda de un propósito que va «más allá de uno mismo» en el modelo de Seligman [18, 19].
De manera similar, el modelo de bienestar psicológico de Carol Ryff postula seis dimensiones clave, entre las que se encuentran la autoaceptación, las relaciones positivas y el propósito en la vida [12]. La Teoría Dasbien se alinea con las dimensiones de Ryff, ya que el «sentido altruista» de Dasbien encuentra resonancia en el «propósito en la vida» de Ryff [12], y la interconexión de sus tres sentidos del amor se manifiesta en la dimensión de «relaciones positivas» [12]. Además, la «evolución mayor» [3] del individuo en el Dasbien coincide con el «crecimiento personal» que Ryff identifica como una parte esencial del bienestar [12].
4.2. Encuentros con la Filosofía y la Ética
El enfoque de la Teoría Dasbien también se presta a un análisis desde la ética. A diferencia del Utilitarismo, que busca maximizar el bien para la mayoría a través de un cálculo de placer y dolor [22, 23], Dasbien opera a una escala micro. El «bien» en la teoría se define según la percepción del receptor individual [2], lo que evita la «limitación obvia» del utilitarismo de justificar el sacrificio de un individuo por el bien colectivo [23]. En contraste con la Deontología de Immanuel Kant, que valora la acción por su adhesión a un deber o una norma abstracta [24], la Teoría Dasbien es un marco intrínsecamente consecuencialista [23]. El valor de la acción amorosa no está en el acto en sí, sino en el resultado tangible y positivo para el receptor, un punto de divergencia fundamental [2].
La Teoría Dasbien se acerca más al Estoicismo en su énfasis en la autogestión y el enfoque en lo interno. El sentido de «dar amor a nuestro propio ser» es un reflejo de la disciplina estoica de la razón y el autocontrol [25, 26]. Ambas filosofías promueven una forma de resiliencia emocional al centrarse en los pensamientos y las acciones internas en lugar de las circunstancias externas [25, 26].
Finalmente, la Teoría Dasbien se sitúa en un diálogo con el Comunitarismo, una corriente filosófica que critica el individualismo y argumenta que la identidad personal y el bien solo pueden entenderse en el contexto de la comunidad [27, 28]. Si bien la Teoría Dasbien se centra en la elección individual de «aprender a amar», su énfasis en los vínculos y la interconexión («recibir amor de otros» y «dar amor a otros») resuena con los principios comunitaristas que defienden que la vida significativa proviene de los lazos con los demás [5, 28].
4.3. Conexiones con la Espiritualidad y la Sabiduría Oriental
El modelo de Dasbien también encuentra resonancia en las tradiciones espirituales. El concepto de Interser (inter-being) del maestro budista Thich Nhat Hanh proporciona una base ontológica para la teoría [31]. El Interser postula que «no existimos independientemente. Nos inter-somos» [31], y que todo se manifiesta gracias a la interdependencia [33]. Desde esta perspectiva, los tres sentidos del amor de Dasbien no son simplemente acciones pragmáticas, sino una manifestación de la realidad fundamental de la interconexión [31]. El «dar» y «recibir» no son actos separados, sino una continua danza de interdependencia que nutre tanto al individuo como al universo [31, 33].
De manera similar, la Teoría Dasbien complementa el concepto japonés del Ikigai, que busca el propósito vital en la intersección de lo que se ama, lo que se sabe hacer, lo que el mundo necesita y por lo que se puede ser recompensado [5]. La investigación proporcionada sugiere que Dasbien proporciona el «flujo afectivo equilibrado» necesario para que ese propósito sea «emocionalmente sostenible» [5]. Sin el cultivo activo de los tres sentidos del amor de Dasbien, un propósito vital, por noble que sea, podría carecer del sustento emocional necesario para perdurar.
5. Discusión Crítica: De la Teoría a la Práctica Sostenible
Aunque la Teoría Dasbien ofrece un modelo operativo y holístico para el bienestar, un análisis crítico debe considerar sus posibles limitaciones, especialmente cuando se la compara con otros marcos. La presencia de la teoría en publicaciones académicas [1, 4] es un punto a su favor, ya que demuestra un compromiso con la revisión por pares y la investigación formal [4]. Sin embargo, es necesario realizar más estudios empíricos para validar la efectividad de sus prácticas.
Una de las críticas más importantes que se puede hacer a la Teoría Dasbien y a modelos similares de bienestar es su posible sesgo individualista [20]. Investigaciones sobre la psicología positiva han señalado que a menudo tiene una «intención o un sesgo individualista muy marcado», reflejando valores «procapitalistas, neoliberales e individualistas» de la sociedad anglosajona [20]. Este enfoque puede llevar a la «tiranía de la positividad», donde se culpa al individuo por su sufrimiento sin considerar los factores externos [34, 35]. La investigación demuestra que el bienestar está profundamente influenciado por factores sistémicos como el ingreso, las condiciones laborales, la desigualdad y la calidad del entorno [36, 37].
La Teoría Dasbien, al presentar el bienestar como un proceso de «aprender a amar» a nivel individual [2], corre el riesgo de ser percibida como una propuesta que simplifica la complejidad del sufrimiento humano. Un modelo que se centra exclusivamente en el cambio personal puede desviar la atención de las causas estructurales del malestar y situar toda la responsabilidad en el individuo, sin reconocer que el bienestar también depende de un sistema social que permita a la persona prosperar.
En contraste, la investigación subraya el poder de la acción colectiva para contrarrestar los problemas sistémicos y el peso emocional que conllevan [38]. Participar en grupos de apoyo [11] o en acciones colectivas para el cambio social [38] no solo amplifica el impacto, sino que también fomenta un sentido de esperanza y control que ayuda a las personas a lidiar con su carga emocional y a creer que el cambio es posible [38].
6. Conclusiones y Recomendaciones
La Teoría Dasbien, con sus tres sentidos del amor, presenta un modelo operativo y holístico para el bienestar individual que se nutre de una amplia gama de marcos teóricos y espirituales. Su definición del amor como una acción intencional que busca el bien del otro y su taxonomía del bienestar, que abarca la receptividad, el autocuidado y el altruismo, la convierten en una guía práctica y aplicable. La teoría establece un diálogo productivo con la psicología positiva, el estoicismo y el comunitarismo, y encuentra una profunda validación ontológica en la filosofía budista del Interser. Su capacidad para traducir conceptos abstractos en pasos concretos y verificables es su mayor fortaleza.
Sin embargo, su principal limitación radica en su enfoque en el cambio individual. Si bien el autocuidado y la acción personal son cruciales, un modelo que no aborde explícitamente los factores socioeconómicos y la desigualdad corre el riesgo de ser una respuesta insuficiente a problemas que son intrínsecamente estructurales. En un mundo marcado por la injusticia y la complejidad, el bienestar no puede ser únicamente una responsabilidad personal, sino que también requiere de la acción colectiva y de la reforma de los sistemas que generan sufrimiento.
Se recomienda que futuras investigaciones sobre la Teoría Dasbien exploren su aplicación en contextos de trabajo social comunitario [10, 39], donde se pueda evaluar su eficacia como un catalizador para el cambio social y no solo como una herramienta de desarrollo personal. De esta forma, la Teoría Dasbien podría trascender su enfoque individualista y manifestar su potencial como un marco para la transformación colectiva, integrando de manera más completa la acción individual con la necesidad de un bien común sistémico.